miércoles, 31 de enero de 2018

Reseña: El Libro de los Portales. Laura Gallego.

el libro de los portales-laura gallego-9788445001301Título: El Libro de los Portales
Título original: El Libro de los Portales
Autor(a): Laura Gallego
Año: 2013
Género: Juvenil. Fantasía. Aventura.

Puntuación: 3'5/5



Sinopsis

No existen normas para aquellos que se atreven a mirar más allá. Los pintores de la Academia de los Portales con los únicos que saben cómo dibujar los extraordinarios portales de viaje que constituyen la red de comunicación y transporte más importante de Darusia. Sus rígidas normas y su exhaustiva formación garantizan una impecable profesionalidad y perfección técnica en todos sus trabajos. Cuando Tabit, estudiante de último año en la Academia, recibe el encargo de pintar un portal para un humilde campesino, no imagina que está apunto de verse involucrado en una trama de intrigas y secretos que podría sacudir los mismos cimientos de la institución.


Reseña

Aunque las historias de Laura Gallego están dirigidas a un público joven, sus historias de fantasía me transportan a mi infancia y me encanta entrar de vez en cuando en esos mundos nuevos que crea con tanta facilidad.

Todo empieza en Darusia, donde la manera más habitual de transportarse es mediante los portales. Los portales se pintan en una pared con pintura de bodarita (un mineral de color rojo que se extrae de la mina) y cada portal tiene su gemelo, de modo que entras por uno y sales por otro. Cada portal tiene además su contraseña en el idioma de los pintores de portales, algunos portales son privados y otros se abren al público por un módico peaje. Sin embargo, las minas producen cada vez menos bodarita y aparece una red de traficantes de bodarita que no sólo la venden más cara sino que además la roban, de las propias minas y de portales abandonados.

Tabit pintando portales

La historia se centra en la vida de varios personajes que se van encontrando y entrelazando. Tabit y Caliandra son estudiantes de último año de la Academia de los Portales, maese Belban es un profesor chiflado con ideas revolucionarias sobre los portales, Yunek es un campesino que quiere comprar un portal para su hermana, Tash es un minero que descubre una veta de bodarita azul en su mina y Rodak es un guardián de portales que ve desaparecer su portal en su primer día de trabajo.
A Tabit le asignan pintar el portal de Yunek, pero su proyecto es cancelado en el último momento. Caliandra gana el puesto de ayudante de maese Belban, puesto que también quiere Tabit. Tash abandona su mina y decide vender la bodarita azul a la Academia para pintar portales diferentes. Yunek y Rodak se embarcan en la misión de desenmascarar al "Invisible", que parece estar detrás de los robos de bodarita y la desaparición de los portales.

Tomorrowland

Si juntamos un mundo nuevo de fantasía, teletransporte por medio de portales y la pluma imaginativa de Laura Gallego, tenemos una historia memorable perfecta para todos los públicos. El tema de los viajes por el espacio-tiempo me ha resultado muy original y muy bien fundamentado, pero además se tratan otros como la diferencia de clases, la corrupción y de una manera más que curiosa, la homosexualidad.

Portales

Aunque el único personaje que me ha llenado de verdad ha sido Tabit, ya que los demás estaban muy poco trabajados y no pasaban de ser secundarios con aire de principales, el libro me ha resultado adictivo y emocionante. Cada capítulo está contado desde el punto de vista de uno de los personajes. Cuando ya empiezas a entender quién es quién y cómo se relacionan entre sí, te embarcas en el misterio del profesor desaparecido y los portales de bodarita azul y el libro se termina en un santiamén. El romance en la última parte de libro no es necesario pero le da un toque tierno al final que me gustó.

No es su mejor libro, pero Laura Gallego nos demuestra una vez más que es una apuesta segura. Si como a mí, te gusta esta autora, no dejes de leerlo.


Mi frase favorita

"Además, el mundo funcionaba de todas formas, mejor o peor, antes de que existiera la Academia. En el fondo, la gente es perfectamente capaz de vivir sin portales, sólo que lo han olvidado."

"- Cuando el portal se activa, es que las coordenadas no son incorrectas -señaló Tabit, citando un conocido refrán de los pintores de portales."

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