Reseña: No hay más preguntas. David Nicholls.

Título: No hay más preguntas

Título original: Starter for Ten

Autor(a): David Nicholls
Año: 2003

Género: Humor. Romántica. Juvenil.

Puntuación: 3'5/5

SINOPSIS

En 1985, Brian Jackson, un joven de dieciocho años, se despide de su madre y sus amigos del instituto para empezar sus estudios en la Universidad de Bristol de literatura inglesa, su gran pasión. A los pocos días de comenzar las clases, cuando lee un anuncio en el que se buscan estudiantes con gran cultura general para participar en un conocido concurso de televisión, No hay más preguntas, no duda en apuntarse, convencido de su sabiduría.

Es entonces cuando la bella Alice Hatbonson, una joven aspirante a actriz, se interpone en su camino. Brian se enamora a primera vista y su fuerte deseo de seducirla entra en colisión con sus ansias de ganar el concurso... A medida que se acerca el gran día, más se convence de que solo su victoria puede hacer que consiga a su chica.

RESEÑA

Después de llorar como nunca con las últimas historias dramáticas que me había leído, me apetecía un cambio y me decidí por esta comedia juvenil de David Nicholls.

Brian Jackson es el típico adolescente de clase media baja que termina el colegio y decide ir a la universidad. En toda su vida nunca ha tenido demasiada suerte; es escuálido y desgarbado, tiene el acné descontrolado, sólo tiene dos personas a las que poder llamar amigos y ninguno va a ir a la universidad, su padre murió cuando tenía doce años y vive con su madre en un pequeño pueblo inglés. Sin embargo, Brian ha sacado muy buenas notas y es un apasionado de los libros, por lo que ir con una beca a la universidad para estudiar Literatura Inglesa y vivir por su cuenta le parece una gran aventura.

Universidad de Bristol, Inglaterra

Brian se va a vivir a un apartamento de estudiantes, que comparte con dos chicos con los que no tiene nada en común, son atléticos, les gusta el deporte y hacer su propia cerveza. Pero la primera noche le llevan a una fiesta a una residencia de chicas, en la que Brian conoce a Rebecca, una joven cínica y mordaz que no se siente impresionada por sus esfuerzos por trabar amistad; y a Alice, una angelical y atractiva criatura, que por supuesto es la más popular y conoce a todo el mundo aunque acabe de llegar, de la que se enamora perdidamente.

"Tarde o temprano me gustaría tener alguna idea original. Y me gustaría gustar, o incluso ser querido, aunque ya veremos qué pasa. En cuanto a trabajar, aún no estoy seguro de qué quiero, pero nada, en todo caso, por lo que sienta desprecio o que me ponga enfermo, lo cual incluye no tener que preocuparme constantemente por el dinero. Todo eso es lo que me dará la educación universitaria."

Aprovechando que Alice también va a ir, Brian decide apuntarse al equipo de "No hay más preguntas", un concurso de televisión que solía ver con su padre y que siempre le ha gustado. Brian se piensa que sabe mucho sobre todo, especialmente de literatura, pero lamentablemente queda el quinto cuando el equipo es de cuatro. Sin embargo, no se deja avasallar y se autodenomina reserva para poder pasar más tiempo con Alice. Y aunque Alice está claramente fuera de su alcance, Brian consigue empezar una relación de amistad que espera que vaya más allá.

James McAvoy como Brian Jackson

No obstante, el primer año de la universidad de Brian no va a resultar como él esperaba: sus amigos de siempre se distancian, su madre parece que ha encontrado un nuevo amor, sus notas en clase van cuesta abajo y cada vez aguanta peor el alcohol. Alice le da pie a empezar una relación, que debe mantener en secreto, pero ella desaparece durante días y nunca se preocupa por él. ¿Conseguirá terminar el año? Y, sobre todo, ¿alcanzará el éxito en "No hay más preguntas" y conquistará el corazón de Alice?

"La independencia es el lujo de esa gente demasiado segura de sí misma, y ocupada, y popular, y atractiva, para sentirse sola, a secas. Y no nos engañemos, que estar solo es lo peor del mundo."

Esta es una novela con un estilo sencillo, directo, que concuerda perfectamente con la edad del protagonista, que es quien nos narra la historia, pero que también mezcla un estilo pretencioso y grandilocuente cuando Brian intenta hacerse el interesante. Más de una vez he tenido que buscar algunas palabras en el diccionario. La trama no tiene giros inesperados sino que va fluyendo lentamente a lo largo de las páginas y nos hace disfrutar de una historia imperfecta, como sus personajes, y con un final que no es necesariamente feliz sino que simplemente sucede, como la vida.

El equipo de "No hay más preguntas"

Brian es un personaje con el que te encariñas inevitablemente, con el que te sientes identificado en algún momento de tu vida. No es tan habitual encontrar un protagonista adolescente que sea masculino y podemos ver que tiene los mismos problemas postpubertad, la misma necesidad de independencia, las mismas cagadas relacionadas con los amigos, la familia y los primeros amores que las protagonistas femeninas.

"Me planteo la posibilidad de ser alcohólico. Me pasa de vez en cuando: tengo la necesidad de ponerme etiquetas. Me he preguntado varias veces en la vida si no seré gótico, homosexual, judío, católico o maníaco depresivo; si no seré adoptado, o tendré un agujero en el corazón, o la facultad de mover objetos; y la conclusión ha sido siempre negativa, la mayoría de las veces muy a mi pesar. La verdad es que no soy nada."

Al inicio de cada capítulo hay una pregunta, estilo concurso, que me ha gustado mucho aunque no me sabía la mayoría de las respuestas. Me encantan los programas de preguntas, sobre todo cuando son algo difíciles, me encanta Saber y Ganar y, últimamente, Boom; así que me sentía muy identificada con Brian en ese aspecto aunque a él le falta un poco de humildad que va ganando gracias a los reveses de la vida universitaria. La verdad es que es una novela divertida, con un toque dramático, que se lee facilísimo y que me ha servido para desconectar de manera perfecta.

La adaptación de esta novela, dirigida por Tom Vaughan en 2006, es prácticamente desconocida a pesar de contar con James McAvoy como protagonista, pero si no te apetece el libro, seguro que te echas unas risas con la película.