Autor(a): Joël Dicker
Año: 2012
Año: 2012
Género: Thriller. Misterio. Policíaco.
Puntuación: 4/5
SINOPSIS
Quién mató a Nola Kellergan es la gran incógnita a desvelar en esta incomparable historia policíaca cuya experiencia de lectura escapa a cualquier tentativa de descripción.
Intentémoslo:
Una novela de suspense a tres tiempos -1975, 1998 y 2008- acerca del asesinato de una joven de quince años en la pequeña ciudad de Aurora, en New Hampshire.
En 2008, Marcus Goldman, un joven escritor, visita a su mentor -Harry Quebert, autor de una aclamada novela- y descubre que éste tuvo una relación secreta con Nola Kellergan. Poco después, Harry es arrestado y acusado de asesinato al encontrarse el cadáver de Nola enterrado en su jardín.
Marcus comienza a investigar y a escribir un libro sobre el caso. Mientras busca demostrar la inocencia de Harry, una trama de secretos sale a la luz. La verdad solo llega al final de un largo, intrincado y apasionante recorrido.
De nuevo descubrí que había una serie basada en el libro y decidí empezar con el libro por si luego me apetecía empezar con la serie. En cuanto lo he terminado, he empezado a ver recomendaciones por todos los sitios sobre el libro, aunque sea de 2012 ¡parece que se ha puesto de moda en 2019!
Un libro dentro de un libro. El famoso Marcus Goldman, escritor de éxito tras su primera novela, sufre un bloqueo al empezar a escribir su segundo libro y decide recurrir a su mentor: su profesor de literatura en la universidad, el también escritor de éxito Harry Quebert.
Harry Quebert vive retirado en la pequeña ciudad de Aurora y recibe a Marcus con la alegría de un abuelo que no ha visto a su nieto en mucho tiempo. Una vez allí, Marcus descubre que Harry estuvo enamorado de una joven de 15 años (cuando él tenía más de 30), Nola Kellergan, a la que escribió su famosa novela, Los Orígenes del Mal. Lamentablemente Nola Kellergan desapareció y nunca se supo más de ella pero Harry nunca lo ha superado y sigue enamorado de aquella chiquilla.
Harry Quebert vive retirado en la pequeña ciudad de Aurora y recibe a Marcus con la alegría de un abuelo que no ha visto a su nieto en mucho tiempo. Una vez allí, Marcus descubre que Harry estuvo enamorado de una joven de 15 años (cuando él tenía más de 30), Nola Kellergan, a la que escribió su famosa novela, Los Orígenes del Mal. Lamentablemente Nola Kellergan desapareció y nunca se supo más de ella pero Harry nunca lo ha superado y sigue enamorado de aquella chiquilla.
Estando allí Marcus, se descubre el cadáver de Nola enterrado en el jardín de Harry y éste es arrestado y acusado de asesinato. Marcus se propone investigar el caso para conseguir la absolución de su amigo y termina escribiendo un libro para demostrar la inocencia de Harry. Sin embargo, un acúmulo de secretos sale a la luz y Marcus descubre que el caso no se investigó como se debía, que todos los habitantes esconden algo, que la vida de Nola era más complicada de lo que parecía al principio y que nadie está exento de culpa.
"La vida es como una carrera a pie, Marcus: siempre habrá gente más rápida o más lenta que usted. Todo lo que cuenta al final es la voluntad que ha puesto en recorrer el camino."
A través de saltos en el tiempo, entre 1985 (la época de la desaparición de Nola), 1998 (la época de la universidad de Marcus y las lecciones de su profesor) y 2008 (el presente), Marcus Goldman se recupera del bloqueo de escritor y consigue unir las piezas del asesinato de Nola, ayudado por el sargento Gahalawood.
Al principio me costó un poco engancharme a la novela, los primeros capítulos eran demasiado introductorios y había muchos nombres, pero poco a poco me fui emocionando con la desaparición de Nola, las pistas que apuntaban a Harry y las pesquisas de Marcus para tratar de exculparlo. A pesar de sus más de 700 páginas, leí la segunda mitad del libro de un tirón y no podía dejar de leer.
Joël Dicker, a pesar de su juventud, muestra una habilidad sorprendente para atrapar al lector en la historia y para crear un thriller deslumbrante lleno de giros argumentales y cambios de rumbo que son un auténtico quebradero de cabeza ( en el buen sentido). El final me dio la sensación de precipitado, condensando toda la historia en apenas un par de capítulos y cambiando por completo el guión inicial del caso.
Lo único negativo, es que da la sensación de haber leído el libro tres veces, ya que a medida que se descubrían cosas nuevas, el protagonista volvía sobre escenas previas a veces bajo el punto de vista de otro de los personajes.
En definitiva, un thriller apasionante por un autor capaz de mantener la tensión en todo momento y de desviar la atención del auténtico culpable pasando por numerosos sospechosos. Una delicia para las largas tardes de invierno.
Si os gusta, apuntaos la serie.
Harry Quebert |
Al principio me costó un poco engancharme a la novela, los primeros capítulos eran demasiado introductorios y había muchos nombres, pero poco a poco me fui emocionando con la desaparición de Nola, las pistas que apuntaban a Harry y las pesquisas de Marcus para tratar de exculparlo. A pesar de sus más de 700 páginas, leí la segunda mitad del libro de un tirón y no podía dejar de leer.
"Un buen libro, Marcus, no se mide sólo por sus últimas palabras, sino por el efecto colectivo de todas las palabras precedentes. Apenas medio segundo después de haber terminado el libro, tras haber leído la última palabra, el lector debe sentirse invadido por un fuerte sentimiento; durante un instante, sólo debe pensar en todo lo que acaba de leer, mirar la portada y sonreír con un gramo de tristeza porque va a echar de menos a todos los personajes. Un buen libro, Marcus, es un libro que uno se arrepiente de terminar."
Joël Dicker, a pesar de su juventud, muestra una habilidad sorprendente para atrapar al lector en la historia y para crear un thriller deslumbrante lleno de giros argumentales y cambios de rumbo que son un auténtico quebradero de cabeza ( en el buen sentido). El final me dio la sensación de precipitado, condensando toda la historia en apenas un par de capítulos y cambiando por completo el guión inicial del caso.
Aurora, New Hampshire |
Lo único negativo, es que da la sensación de haber leído el libro tres veces, ya que a medida que se descubrían cosas nuevas, el protagonista volvía sobre escenas previas a veces bajo el punto de vista de otro de los personajes.
En definitiva, un thriller apasionante por un autor capaz de mantener la tensión en todo momento y de desviar la atención del auténtico culpable pasando por numerosos sospechosos. Una delicia para las largas tardes de invierno.
Si os gusta, apuntaos la serie.
"-Marcus, ¿sabe cuál es el único modo de medir cuánto se ama a alguien? -No. -Perdiendo a esa persona."
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