miércoles, 25 de septiembre de 2019

Reseña: Los Señores del Tiempo (3). Eva García Sáenz de Urutri

Los señores del tiempo (La trilogía de La ciudad blanca, #3)Título: Los Señores del Tiempo
Título original: Los Señores del Tiempo
Autor(a): Eva García Sáenz de Urturi
Año: 2018
Género: Thriller. Intriga. Policíaco.

Puntuación: 4/5



SINOPSIS

Vitoria, 2019. Los señores del tiempo, una épica novela histórica ambientada en el medievo, se publica con gran éxito bajo un misterioso pseudónimo: Diego Veilaz.

Victoria, 1192. Diago Vela, el legendario conde don Vela, retorna a su villa después de dos años en una peligrosa misión encomendada por el rey Sancho VI el Sabio de Navarra y encuentra a su hermano Nagorno desposado con la que era su prometida, la noble e intrigante Onneca de Maestu.

Unai López de Ayala, Kraken, se enfrenta a unas desconcertantes muertes que siguen un modus operandi medieval. Son idénticas a los asesinatos descritos en la novela Los señores del tiempo: un envenenamiento con la «mosca española» ―la Viagra medieval―, unas víctimas emparedadas como se hacía antaño en el «voto de tinieblas» y un «encubamiento», que consistía en lanzar al río a un preso encerrado en un tonel junto con un gallo, un perro, un gato y una víbora.
Las investigaciones llevarán a Kraken hasta el señor de la torre de Nograro, una casa-torre fortificada habitada ininterrumpidamente desde hace mil años por el primogénito varón. Pero el reverso de tanta nobleza es la tendencia de los señores de la torre a padecer el trastorno de identidad múltiple, un detalle que arrastrará a Estíbaliz a vivir una arriesgada historia de amor.
Unai López de Ayala acabará descubriendo que Los señores del tiempo tiene mucho que ver con su propio pasado. Y ese hallazgo cambiará su vida y la de su familia.
 



RESEÑA

Descubrí a Eva García hace unos meses cuando empecé a leer por todas partes reseñas increíbles de su trilogía de la Ciudad Blanca. Devoré los dos primeros libros y, a falta de este tercero, comencé su otra serie, La Saga de los Longevos. Tenía muchísimas ganas de continuar ambas pero no sé si tenía más ganas de volver a leer sobre el perspicaz detective "Kraken" o sobre el misterioso Iago del Castillo y su longeva familia. Eva García me ha ahorrado el tener que elegir y con el cierre de la trilogía de la Ciudad Blanca nos ofrece una muestra de nuestra familia favorita.


En Vitoria todo el mundo está emocionado con la publicación de la novela "Los Señores del Tiempo". El hecho de que el autor sea desconocido, incluso para el propio editor, consigue aumentar la expectación alrededor de la historia ambientada en Victoria en 1192 y escrita a modo de diario de la mano del legendario conde Diago Vela, que regresa a su villa tras una peligrosa misión descubriendo que todo el mundo le ha dado por muerto, incluida su prometida, Onneca de Maestu, que se acaba de casar con su hermano Nagorno. La novela, publicada bajo el pseudónimo de Diego Veilaz, detalla fielmente la vida en el medievo, el abandono del rey Sancho VI el Sabio de Navarra y las penurias sufridas por el pueblo.



Una serie de crímenes similares a los descritos en la novela desatan el caos en la ciudad y obligan al detective Unai López de Ayala, alias ""Kraken", a investigar el origen de la novela  de su autor en una carrera contra reloj. Un hombre es asesinado mediante envenenamiento por "mosca española" o escarabajo aceitero (la Viagra medieval), dos hermanas son emparedadas al igual que las mujeres medievales hacían el "voto de tinieblas" y un joven sufre el castigo denominado "encubamiento" en el que la víctima era encerrada en un tonel junto con un perro, una gato, un gallo y una serpiente, para después ser arrojado al río.

"Aquí termina tu caza, aquí empieza la mía."

Unai, siempre ayudado por su compañera Estíbaliz y supervisado por la subcomisaria (y su pareja) Alba de Salvatierra, utilizará la novela como herramienta para descubrir al asesino. Sus páginas le conducirán a la torre de Nograro, donde habita el enigmático conde, único heredero de la torre y tierras aledañas. Ramiro Alvar, conde de Nograro, se convierte en el principal sospechoso de los crímenes, pero Unai deberá recurrir a su experiencia como perfilador y a la ayuda de su mentora  para descubrir qué esconde en realidad el conde.

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Torre de Nograro


Eva García se ha superado con esta novela dentro de una novela. Me ha encantado el manejo de las dos historias, pasado y presente, habilidad de la que ya hacía gala en las entregas anteriores pero que presenta de manera excepcional en esta última obra. Los dos hilos temporales están llenos de tramas que Eva consigue abrir y cerrar de forma impecable, resolviendo todas las historias paralelas a la trama principal. La ambientación histórica es espectacular y las escenas se suceden con naturalidad en la vida de Diago Vela, aunque en el caso de Unai, hay demasiada información que se mete a la fuerza y queda un poco artificial. ¿Por qué Unai sabe tanto de quimerismos y de DNA? Es policía pero no es médico ni biólogo.


"Siempre ha habido una cadena de violencia que se remonta a las primeras edades del hombre."

Las descripciones en esta saga están tan bien explicadas que te transportan sin darte cuenta a la antigua Victoria con sus murallas y sus casas, al igual que a la actual Vitoria con sus plazas y sus pueblos; sientes que realmente estás ahí. Y además de la atmósfera, Eva perfecciona la historia con unos personajes increíbles. Aunque Unai me ha gustado menos que en los libros anteriores, por fin lo descubrimos más humano, más emocional, enamorado de su pequeña Deba y con una decisión que tomar: seguir dándolo todo por las víctimas o abandonar el cuerpo por el bien de su familia. Estíbaliz y Alba me han decepcionado un poco, la primera porque parece nueva y se deja seducir por el sospechoso, y la segunda porque ha perdido esa chispa que la convertía en buena policía. También he echado de menos el protagonismo del abuelo.


Por supuesto, lo mejor de la novela para mí ha sido volver a encontrarme con Iago del Castillo y su familia. En cuanto he leído sobre Diago Vela y su hermano Nagorno, su hermana Lyra, su primo Héctor y su sobrino Gunnar; me he emocionado al descubrir que se trataba de mi familia longeva favorita. La parte histórica es la que más me ha gustado de toda la novela, la vida cotidiana del siglo XII, las luchas de poder entre los señores feudales, la brutalidad de los castigos, las penurias del aislamiento, la traición de Onneca y Nagorno, el tímido amor de Diago y Alix; y la entrañable abuela Lucía.


"No nos pillamos de gente fácil en situaciones fáciles. Tú y yo nos pillamos de gente complicada en situaciones complicadas."

La parte de la personalidad múltiple me ha encantado, aunque un poco forzado, ya sabéis que me fascina todo lo psiquiátrico y las personalidades de Alvar me han enganchado desde el principio. La amnesia completa entre las dos partes de Alvar y lo diferentes que son me han resultado muy auténticas.
¿Y el final? ¡Vaya final! En los otros libros más o menos tenía idea de por dónde iban los tiros pero en esta novela no podría haber estado más perdida. He tenido mis sospechas claro, pero Eva da un giro brutal y me ha dejado con la boca abierta.

En conclusión, una novela dentro de una novela policiaca, con crímenes medievales, una trama histórica espectacular, un ritmo ágil y un desenlace sorprendente. Un cierre de trilogía maravilloso.

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