Reseña: Una llama entre cenizas (1). Sabaa Tahir.

Título: Una llama entre cenizas

Título original: An Ember in the Ashes

Autor(a): Sabaa Tahir
Año: 2015

Género: Fantasía. Aventura.

Puntuación: 4/5

SINOPSIS

Laia es una huérfana que lucha por salvar a su único hermano. Elias es un soldado que lucha por su libertad. Cuando ambos se encuentren, no tardarán en descubrir que a veces es imposible luchar contra el destino... y que las decisiones que ellos tomen para sobrevivir pueden cambiar el futuro del Imperio. Laia y Elias descubrirán que el Imperio sólo puede vencerse desde dentro… El futuro de éste está en sus manos.

RESEÑA

Esta portada me llamó la atención desde el primer momento y la sinopsis me encantó. Siempre me da un poco de pereza lo predecible del romance juvenil pero la fantasía de esta historia hizo que mereciera mucho la pena.

Hace quinientos años, el guerrero Taius unió a los fracturados clanes marciales arrasando todo a su paso desde el norte, aplastando al Imperio Académico y nombrándose a sí mismo emperador de todo el continente. Taius cubría su rostro con una máscara de plata y tenía a su mando al mayor ejército del mundo. Pero los augures, los sacerdotes del imperio, predijeron que un día su linaje se acabaría: "De entre la juventud curtida en la batalla surgirá el anunciado, el más grande entre los emperadores, azote de nuestros enemigos, comandante de las más devastadoras huestes. Y el Imperio será uno".
Los augures crearon junto a la ciudad de Serra una academia llamada Risco Negro, donde los jóvenes marciales se entrenan desde los 6 hasta los 20 años para convertirse en máscaras, el rango más alto que pueden obtener los soldados tras sufrir un adiestramiento formidable y soportar los castigos más inhumanos. En las forjas de Serra se trabaja el acero sérrico que se utiliza en las hojas marciales, el secreto mejor guardado del imperio y el objetivo de los rebeldes.

Elias es un joven soldado que está a punto de convertirse en Máscara de pleno derecho aunque, al contrario que el resto de sus compañeros, la máscara no se le ha adherido completamente a la piel; posiblemente porque en el fondo de su ser odia al Imperio, odia la academia donde ha pasado casi toda su vida y lo más importante, odia a su madre, la comandante de Risco Negro, que lo abandonó al nacer en manos de un clan tribal. Elias está decidido a desertar tras la graduación y huir a tierras libres, pero Caín, uno de los catorce augures, le aseguró que sólo si se quedaba conseguiría salvar su alma y ser completamente libre.

"El campo de batalla es mi templo. La punta de la espada es mi sacerdote. El baile de la muerte es mi plegaria. El golpe de gracia es mi liberación."

Laia es una joven académica que vive junto con sus abuelos y su hermano Darin en una humilde casa en Serra. Una noche, los máscaras irrumpen en su casa, matan a sus abuelos y hacen prisionero a su hermano Darin por trabajar con los rebeldes. Laia consigue escapar y decide que su única oportunidad para salvar a Darin es unirse a la resistencia ya que sus padres los lideraron hace años antes de ser traicionados y ejecutados por la comandante del Risco Negro. La resistencia está formada por dos facciones, los mayores dirigidos por Sana que votan por ayudar a Laia, y los jóvenes, capitaneados por Mazen que deciden rescatar a Darin a cambio de que Laia se infiltre en Risco Negro como doncella de la comandante y le revele sus planes. Su contacto, Keenan, el segundo al mando de Mazen, recibirá la información y, a cambio, liberarán a Darin.

 

Tras la graduación de Elias y la llegada de Laia como doncella al Risco Negro, los augures revelan que ha llegado el momento de elegir al nuevo emperador, porque Taius no llegará a tener descendencia masculina. Se decreta que habrá cuatro aspirantes que deberán superar cuatro Pruebas: valor, astucia, fuerza y lealtad. El aspirante que gane dos de las cuatro Pruebas será nombrado emperador, el siguiente mejor será nombrado Verdugo de Sangre (la mano derecha del emperador y jefe de la Guardia Negra, la encargada de garantizar la lealtad de los militares). El aspirante que no supere alguna de las Pruebas morirá. Elias Veturius se convierte en uno de los aspirantes, junto con Helene Aquilla, su mejor amiga y una de las pocas mujeres entre los Máscaras, y los hermanos gemelos Marcus y Zacharias Farrar, dos de los soldados más sanguinarios y despreciables. 

"Cuatro son y cuatro rasgos buscamos: valor para enfrentarse a sus peores miedos, astucia para superar a sus enemigos, fuerza de brazos, mente y corazón, y lealtad para quebrar el alma."

Mientras Elias intenta superar las pruebas para sobrevivir, conoce a Laia, que sufre los castigos de su madre con estoicidad para tener la oportunidad de averiguar información para pasar a los rebeldes y salvar a su hermano. Elias debe decidir entre los sentimientos que Helene tiene por él y los sentimientos que él tiene por Laia, mientras lucha contra el odio que le profesa su madre, soporta los constantes ataques de Marcus e investiga los misteriosos propósitos de los augures, que son capaces de leer la mente, de manipular el tiempo y de despertar a seres que no son de este mundo.

Sabaa Tahir escribe una historia inspiradora a dos voces, dos personas en bandos contrarios, que deberían ser enemigos, que inicialmente sienten asco y pena el uno del orto, pero que acabarán unidos por un objetivo común: conseguir la libertad. Aunque esta es una historia que ya he leído en muchas ocasiones (esclavo y princesa, profesor y estudiante, lord y doncella) en ficción y en fantasía, Sabaa Tahir consigue impregnarla de novedad e intriga al situarla en un mundo completamente nuevo, con imperios, soldados y rebeldes, y magia en todos sus rincones.

"- Existen dos clases de culpa -le explico en voz baja-: la que se convierte en una carga y la que te da un propósito. Deja que la culpa te impulse, que te recuerde quién quieres ser. Dibuja una línea mental y no vuelvas a cruzarla. Tienes alma. Está herida, pero está. No permitas que te la quiten, Elias."

La evolución de los personajes es lo que más me ha gustado. Laia pasa de ser una hermana pequeña sumisa y obediente, tímida y asustadiza, a convertirse en una espía, a sacar fuerzas y valor por salvar a su hermano y a iniciar una auténtica revolución incluso sin saberlo. Elias no cambia tanto; al principio es un soldado a disgusto con el imperio que lo ha formado, con ganas de escapar y abandonar a los demás a su suerte; pero a medida que avanza la trama se observa que supera el temor a las represalias y a los castigos, y que comienza a pensar en los demás, tanto como para arriesgar todo por Laia.
Los personajes secundarios también aportan su granito de arena al argumento. Me ha fascinado el papel de los augures, como auténticos semidioses destinados al imperio; y muy especialmente, el personaje de Helene, obediente, severa y en ocasiones algo despiadada, pero que esconde un buen corazón, que la pondrán en el dilema de elegir a Elias o al Imperio.

Helene Aquilla

Aunque me ha resultado bastante predecible la relación entre los protagonistas en un auténtico triángulo, o más bien cuadrado, amoroso; Sabaa Tahir ha conseguido mantener mi atención a lo largo de toda la novela. La autora no se centra en la parte romántica, aunque está presente todo el tiempo, sino que nos lleva a un mundo lleno de magia, drama y aventuras con un ritmo trepidante que te apasionará.
El final te deja con ganas de más. Estoy deseando leer la segunda parte de esta trilogía, averiguar algo más sobre el enigmático Portador de la Noche y sobre todo descubrir qué será de Elias y Laia.

"Eres una llama entre cenizas, Elias Veturius. Prenderás y arderás, arrasarás y destruirás. No puedes cambiarlo. No puedes evitarlo."

"Estás llena, Laia. Llena de vida, de oscuridad, de fuerza y de energía. Estás en nuestros sueños. Arderás, ya que eres una llama entre cenizas. Es tu destino."

En conclusión, una historia fantástica que hipnotiza desde la primera página y que nos arrastra a un mundo mágico de profecías, conspiraciones, soldados y rebeldes, retos letales, y un amor entre dos personas destinadas a odiarse.