Autor(a): Kass Morgan
Año: 2017
Año: 2017
Género: Distopía. Drama. Juvenil.
Puntuación: 3'5/5
SINOPSIS
Nueva York, año 2118. En Manhattan se alza una supertorre de mil pisos, un prodigio arquitectónico cuya cúspide parece tocar el cielo. Sin embargo, en ese suntuoso remanso de tecnología punta y glamour futurista, cinco adolescentes ocultan peligrosos secretos. Y en las vertiginosas alturas de estas cumbres doradas. el menor paso en falso se puede saldar con una caída devastadora.
Un paso en falso puede suponer una caída mortal.
Para los que no hayáis leído el primer libro, este es una continuación directa y la reseña va a contener muchos spoilers, leed El Piso Mil primero.
Si el primer libro ya me pareció una copia de Gossip Girl en modo distopía, este segundo se ha convertido en una copia de la película Las Seductoras. ¿Pero qué libro no triunfaría con Sigourney Weaver y Jennifer Love Hewitt?
Estamos en Nueva York en el año 2118 y casi toda la población vive en la supertorre, un rascacielos gigantesco de mil pisos que funciona como una ciudad autosuficiente.
Tras la trágica muerte de Eris, los cuatro protagonistas (Avery, Leda, Rylin y Watt) intentan guardar el secreto de lo que realmente sucedió mientras una nueva chica llega a la ciudad (Calliope). Cuando Rylin es aceptada en la escuela Berkeley, cientos de pisos más arriba de donde vive, Watt empieza a salir con Leda como forma de librarse de su chantaje y Avery ve peligrar su relación con Atlas por la llegada de Calliope, todos sus secretos amenazarán con descubrirse si siguen peleando los unos contra los otros.
Avery es la chica perfecta y la más popular, brillando allí donde va. Diseñada genéticamente, vive en el piso mil con sus padres y su hermano adoptivo Atlas, y es desde su azotea secreta donde Eris cayó al vacío. Embargada por la culpa de haber abierto la azotea y haber presenciado la muerte de Eris, aislada de su amiga Leda por todos los secretos y abrumada por tener que ocultar su relación con Atlas, las cosas no se ponen más fáciles cuando la chica nueva llega a la ciudad dispuesta a camelarse a su hermano. Por si eso fuera poco, sus padres empiezan a darse cuenta de su "malsana" relación y deciden enviar a Atlas a Dubai a trabajar en las supertorres gemelas que está construyendo su padre. ¿Será el amor suficiente para mantenerles unidos?
Leda es la causante principal de la muerte de Eris. Cegada por las drogas y el alcohol y por la errónea creencia de que Eris se estaba acostando con su padre, hizo algo de lo que se arrepiente profundamente. Pero esa noche amenazó a todos sus amigos con desvelar sus secretos si no guardaban el suyo y se ha metido tanto en ese círculo vicioso de acoso y chantajes que ahora no puede salir. Preocupada porque los demás podrían traicionarla, recurre a Watt mediante chantajes para que le ayude a espiarles. Sin embargo, pronto se da cuenta de que es agotador mantener a todo el mundo en contra y que todo sería más sencillo si simplemente pidiera perdón e intentase arreglar las cosas. ¿Ayudar a sus antiguos amigos y actuales enemigos será suficiente para evitar que ella sea la siguiente en caer?
"Lo malo de la verdad era que, una vez descubierta, resultaba imposible olvidarla. Daba igual cuántas pastillas se tomara Leda, aún seguía allí, agazapada en los recovecos de su mente como un huésped impertinente. No había suficientes pastillas en el mundo para conseguir que se fuera."
Watt es un joven muy inteligente y con ayuda de Nadia, el ilegal ordenador cuántico que se ha introducido él mismo bajo el cráneo, es un hacker imparable. Todo se va al traste cuando, contratado por Leda, se enamora de Avery y descubre que sale con Atlas. Cuando Leda le droga y descubre el secreto de Avery y de paso la existencia de Nadia, Watt no puede pensar más que en vengarse. Coaccionado por Leda, sabe que si no la obedece contará a las autoridades su secreto sobre Nadia y podrían encerrarle en la cárcel. Decide continuar ayudando a Leda para ganarse su confianza y conseguir una confesión sobre la muerte de Eris para poder librarse de una vez por todas de los chantajes de Leda. ¿Y si descubre que Leda no es tan mala como aparenta y que ambos se parecen más de lo que le gustaría?
"Ignoraba cómo se las habría apañado, pero lo cierto era que había desenterrado el secreto más peligroso de Watt. Leda podría delatarlo cuando quisiera, acusándolo de posesión de un ordenador cuántico ilegal. Nadia, por supuesto, acabaría siendo destruida para siempre. En cuanto a él, se pudriría en la cárcel de por vida. Con suerte."
Rylin vive en los pisos más bajos de la torre y, amenazada por su exnovio, se ve obligada a robar pastillas a Cord, un amigo de Avery, en cuya casa trabaja limpiando. Cuando el hermano de Cord la descubre, la obliga a mentir a Cord y abandonarle. Rylin vuelve a su casa con idea de no cruzarse más con los encumbrados (los de los pisos más altos) pero todo cambia cuando gana una beca, creada por los padres de Eris, para estudiar en la escuela Berkeley, la más exclusiva de la Torre, donde acuden a clase Avery, Leda y Cord. Aunque intenta pasar desapercibida y adaptarse al nuevo colegio, se cruza constantemente con Leda, que conoce su secreto y la chantajea para no contárselo a Cord. Además, empieza a distanciarse de sus amigos de siempre que se quedan en la base de la Torre mientras ella acude todos los días a los pisos más altos. ¿Ser sincera será suficiente para recuperar la confianza perdida?
"Solo era cuestión de tiempo que hiciera algo para conseguir comida; aunque tuviera que robarla. Su hermana pequeña había sido condenada a muerte por tener un corazón de oro. Él era el encargado de protegerla. Y, por primera vez en su vida, le había fallado."
Calliope es la chica nueva que ha vivido toda la vida con su madre saltando de ciudad en ciudad, timando a un hombre tras otro para poder conseguir su dinero y vivir con un lujo que creen merecer, y cambiando de identidad constantemente. Ahora es Calliope Brown y se aloja en el Nuage, uno de los hoteles más exclusivos de la Torre, que consiguen de forma gratis tras una estafa de lo más fácil. Mientras su madre se camela a un hombre muy rico, Calliope se concentra en Atlas, al que ya conoció cuando viajaba por África pero que no llegó a engañar. Lo que al principio empieza como un timo cambia cuando Calliope se da cuenta que le gusta Atlas y le gusta vivir en la Torre. Sin embargo, Avery no permitirá que se salga con la suya y amenazará con descubrirla.
De nuevo Katharine McGee nos da muy poca información sobre la distopía en sí dejando un poco de lado la ambientación, y se centra en la parte más dramática y romántica de nuestros protagonistas adolescentes. Aunque está muy entretenido con su red de mentiras e intrigas, me ha resultado un poco demasiado superficial y por supuesto un plagio total a la película Las Seductoras, con diálogos que parecen casi iguales (¿eso se puede hacer?).
A pesar de ser un poco flojo, engancha y uno no quiere dejar de leer hasta saber qué pasará con cada uno de los personajes (¡igual que en Gossip Girl!). En los últimos capítulos aparece un personaje del que ya nos habíamos olvidado y da toda la vuelta a la historia, uniendo a nuestros protagonistas contra un enemigo común. Y al final nos dejan un epílogo vs prólogo del siguiente libro que no entiendo muy bien que hacía ahí y consiguió descolocarme.
El tercer libro sale publicado este verano en inglés y habrá que esperar un poco para su traducción en español. No estoy deseando leerlo ya, pero será interesante ver el giro que Katharine da al ultimo libro para cerrar la saga.
Si el primer libro ya me pareció una copia de Gossip Girl en modo distopía, este segundo se ha convertido en una copia de la película Las Seductoras. ¿Pero qué libro no triunfaría con Sigourney Weaver y Jennifer Love Hewitt?
Jennifer Love Hewitt en Las Seductoras |
Estamos en Nueva York en el año 2118 y casi toda la población vive en la supertorre, un rascacielos gigantesco de mil pisos que funciona como una ciudad autosuficiente.
Tras la trágica muerte de Eris, los cuatro protagonistas (Avery, Leda, Rylin y Watt) intentan guardar el secreto de lo que realmente sucedió mientras una nueva chica llega a la ciudad (Calliope). Cuando Rylin es aceptada en la escuela Berkeley, cientos de pisos más arriba de donde vive, Watt empieza a salir con Leda como forma de librarse de su chantaje y Avery ve peligrar su relación con Atlas por la llegada de Calliope, todos sus secretos amenazarán con descubrirse si siguen peleando los unos contra los otros.
"Ojo por ojo y diente por diente. La frase no dejaba de repetirse en su mente, resonando tan atronadora como el entrechocar de unos címbalos. Y caída por caída, añadió una voz dentro de su cabeza."
Avery es Serena Van der Woodsen |
"Leda sabía que estaban juntos, y si aún no lo había proclamado a los cuatro vientos era porque Avery la había visto empujar a Eris desde lo alto de la azotea aquella noche."
Leda es Blair Waldorf |
"Lo malo de la verdad era que, una vez descubierta, resultaba imposible olvidarla. Daba igual cuántas pastillas se tomara Leda, aún seguía allí, agazapada en los recovecos de su mente como un huésped impertinente. No había suficientes pastillas en el mundo para conseguir que se fuera."
Watt es Dan Humphrey |
"Ignoraba cómo se las habría apañado, pero lo cierto era que había desenterrado el secreto más peligroso de Watt. Leda podría delatarlo cuando quisiera, acusándolo de posesión de un ordenador cuántico ilegal. Nadia, por supuesto, acabaría siendo destruida para siempre. En cuanto a él, se pudriría en la cárcel de por vida. Con suerte."
Rylin es Vanesa Abrams |
"Solo era cuestión de tiempo que hiciera algo para conseguir comida; aunque tuviera que robarla. Su hermana pequeña había sido condenada a muerte por tener un corazón de oro. Él era el encargado de protegerla. Y, por primera vez en su vida, le había fallado."
Calliope es Jennifer Love Hewitt |
"Ah, había tantas maneras de enganchar a un incauto (el tropezón «por casualidad», la miradita de soslayo, la sonrisa de complicidad, el coqueteo, la confrontación, el accidente), y en todas ellas Calliope era una experta. Todas las actuaciones que había iniciado se habían saldado con éxito."
De nuevo Katharine McGee nos da muy poca información sobre la distopía en sí dejando un poco de lado la ambientación, y se centra en la parte más dramática y romántica de nuestros protagonistas adolescentes. Aunque está muy entretenido con su red de mentiras e intrigas, me ha resultado un poco demasiado superficial y por supuesto un plagio total a la película Las Seductoras, con diálogos que parecen casi iguales (¿eso se puede hacer?).
A pesar de ser un poco flojo, engancha y uno no quiere dejar de leer hasta saber qué pasará con cada uno de los personajes (¡igual que en Gossip Girl!). En los últimos capítulos aparece un personaje del que ya nos habíamos olvidado y da toda la vuelta a la historia, uniendo a nuestros protagonistas contra un enemigo común. Y al final nos dejan un epílogo vs prólogo del siguiente libro que no entiendo muy bien que hacía ahí y consiguió descolocarme.
El tercer libro sale publicado este verano en inglés y habrá que esperar un poco para su traducción en español. No estoy deseando leerlo ya, pero será interesante ver el giro que Katharine da al ultimo libro para cerrar la saga.
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